lunes, 18 de julio de 2011

El fin de Harry Potter

Algo tal vez muy típico, pero digno de mención. Después de haber visto Harry Potter y las Reliquias de la Muerte. Parte II hace unos pocos días en el cine un ligero sentimiento de nostalgia me ha invadido. La mágica saga que me acompañó desde pequeño en libros, películas y videojuegos toca oficialmente su fin y me siento algo más viejo... Aunque no por ello dejaré que Hogwarts se escape de mi corazón.

sábado, 2 de julio de 2011

Me gusta el absurdo

Me gustan las historias absurdas porque son las que más se asemejan a la realidad. Te pondré un ejemplo.

¿Por que te gustaría morir? ¿ Para salvar a tus seres queridos? ¿Luchando por una causa justa? ¿Defendiendo tus ideales? En la ficción los personajes siempre mueren con algún propósito, mientras contribuía al desarrollo de la historia, de una forma en la mayoría de los casos incluso heroica. Eso no ocurre en la vida real. En ella las cosas no tienen por que tener sentido.

La única diferencia entre la realidad y la fantasía es que en esta ultima puedes imaginar las cosas de tal manera que tengan sentido.

viernes, 1 de julio de 2011

Lo que hice ayer

   Ayer aproveché bien el día.

   Por varios motivos acabé recordado cosas que tenía olvidadas y retomando costumbres que perdí con el paso del tiempo. Nada más levantarme me puse a ordenar los cajones de mi cuarto, algunos objetos vieron la luz del sol tras muchos años de cautiverio.  Afiné y limpié el polvo a mi viejo violín y estuve tocándolo hasta la hora del almuerzo. Después de comer cogí el bajo y no lo solté hasta hacerme heridas en la yema de los dedos.

   Maté zombies, ojeé libros de mi infancia, colgué antiguos posters y con la noche  ya incipiente escuché canciones que me trajeron buenos recuerdos, me corté con el recipiente de una lasaña precocinada, lo que me dejó un molesto corte con sabores a sangre y queso.

  Expiró a el mes de junio y yo seguía despierto frente al ordenador. A entradas horas de la madrugada jugué a vídeo-juegos que me macaron varios años atrás, y cuando ya el sueño me iba venciendo fui incitado a escribir esta entrada en mi blog, el cual abandoné a principios de este mes por culpa de los exámenes y no ha sido hasta este momento cuando he recuperado la determinación y la voluntad para continuarlo.

La de actividades que se pueden hacer un día en el que no tienes nada que hacer. Y no solo recuperar cosas, ayer también dejé atrás otras tantas, tengo una capacidad de carga limitada.